sábado, 13 de agosto de 2011

14 AÑOS

Los selectivos recuerdos
de mis primeros años de vida,
esos de color violeta,
que pase a tu lado
evocan los detalles más pequeños
de la felicidad.
Decir que eras dueña
de mi atribulado corazón,
era decir una perogrullada.
Todo lo que hablabas
se convertia en proverbio,
paremia de mi son.
Los días se convertian
en correspondecia especial
de la llama de la pasión.
Estabas (estas) llena de enigmas
de una mapa del tesoro
que releia con esmero,
para alcanzar la meta
de tu precioso, escultural cuerpo.
Tu sangre volcánica
emanaba del excepcional
drenaje de los sueños.
Purificabas con tu saber
el cielo, la tierra y a mí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario