Soy vecino de la oscuridad,
ya nada es verdadero.
Y si repaso lo vivido…
Cerré los ojos,
y vi el desánimo y el desaliento
y el desinterés y el abatimiento
y la tristeza y el hundimiento
girando sobre mi cuerpo.
Lágrimas, lágrimas siempre,
las arras de oro de mi aposento.
Hablo como si fuera de mí,
Y escribo pensando en ti.
Si vieras la que en ti duerme
en un jardín de edén,
te verías elegante de mil leyendas.
Te redimes. Es el sinfín
del ave fénix.
Aunque pienses
que en ti es de noche,
pronto asistirás
al animoso renacer
de la mujer que eres.
Corazón del amanecer,
hechizo musical,
Word en blanco de proyectos.
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