Silencio, soledad…
Algo me queda
En mi triste alma,
Cuando acometo
El angosto sendero
De mis recuerdos…
Elijo esa explanada
De la mezquitas
Donde te robe
La última caricia…
Pero es este momento,
Ahora, en este instante.
De aturdimiento sideral
Mis agónicas lágrimas
Me elevan
Hacia tu sonrisa…
He aquí tu presencia
Que me es más dulce
Que mil panales de abejas…
Ésta es la prolongada agonía,
El estimado llanto
De los sueños…
Oigo tu voz,
Escucho como nunca
Tu bendito verbo,
En el eco desierto
De mi corazón.
Y estas escenas
Que tiernamente siento
Hoy. Ahora,
Por el páramo
De mi memoria
Cuanta felicidad
En el pasado sostuvieron…
No hay comentarios:
Publicar un comentario